El 24 de julio estrenó en cines Los 4 Fantásticos: Primeros pasos, la nueva apuesta de Marvel Studios para intentar repuntar. Luego de varios traspiés, pequeños aciertos y grandes fracasos, la cinta del director Matt Shakman (WandaVision) se convirtió en una de las mejores desde Avengers: Endgame (2019).
Sin duda, un gran acierto fue no volver a contar la historia de origen de la famosa familia de superhéroes, más allá de una pequeña puesta a punto al inicio del filme. Luego de las versiones de 2005 (y su secuela con Silver Surfer de 2007) y de 2015, los amantes del cine de superhéroes ya conocían muy bien la historia de Reed, Sue, Johnny y Ben. Partiendo desde allí, y tal como lo hicieron con el Spider-Man de Tom Holland, las mentes de Marvel se dieron cuenta que retomar ese camino sería una pérdida de tiempo.
En lugar de volver a contar los orígenes de la primera familia de héroes, el estudio se centró en una historia más fuerte y contundente en la que plantea un dilema moral para los protagonistas: ¿salvar al mundo o salvar a un ser querido? La premisa en sí ya es atractiva, pero lo es aún más en el contexto.

Un escenario distinto
Ese contexto no es otro que el del universo 828, y ahí está el segundo gran acierto de la película. Los 4 Fantásticos: Primeros Pasos no se ambienta en el universo de los Vengadores (el 616), lo que le dio rienda suelta a los guionistas para contar lo que quisieran y jugar con una galería de personajes que no chocarían con ningún otro producto del MCU.
Pero el beneficio no fue sólo para el equipo creativo, sino también para los fanáticos. Por primera vez en un tiempo, los espectadores podían ir al cine sin necesidad de ver otras películas antes. Si bien desde la previa se sabía que el filme sería parte de algo más grande, no se sintió así, y eso le dio un respiro al público.
La cinta protagonizada por Pedro Pascal, Vanesa Kirby, Joseph Quinn y Ebon Moss-Bachrach tiene como escenario un mundo retro futurista. La estética y la paleta de colores dista mucho del tono de las anteriores pelis Marvel. Esta experiencia ofrece alivio visual a la vez que despierta el interés por conocer más de ese mundo. Algo similar a lo que se sintió con Deadpool y Wolverine (2024).

Una trama fresca
La trama es bastante sólida: Los 4 Fantásticos, celebridades en su tierra, deben enfrentar una amenaza de nivel cósmico como Galactus y su heraldo Silver Surfer (Shalla-Ball). Los héroes pronto se verán en un aprieto cuando el conflicto se vuelva más personal de lo que esperaban.
La impotencia y la decepción de los ciudadanos de Nueva York agregan un condimento especial a la mezcla que se traducirá en presión sobre los protagonistas. Reed intentará hasta lo imposible por salvar al mundo, poniendo en duda el suyo propio. Pero los héroes no se resignan y continuarán hasta último minuto darlo todo.
Lo interesante de esta historia es que dejan en claro que Galactus no es un villano corriente. Los planes fallan uno tras otro hasta que no queda más que el sacrificio como opción. Sólo así se podrá derrotar a una entidad hambrienta.

No son sólo caras conocidas
Otro de los puntos fuertes de Los 4 Fantásticos: Primeros Pasos es su reparto: cada uno de los protagonistas ejerce a la perfección su rol. Pascal interpreta a un frío y calculador Reed Richards. Su misión de salvar al planeta va más allá de sus intereses personales, lo que lo pone en situaciones realmente complicadas con su familia.
Kirby es Sue Storm, una mujer fuerte que dará hasta su último aliento por sus seres queridos, así tenga que sacar su lado oscuro (y los fanáticos de los comics sabemos que lo tiene). Su interpretación es firme y de lo más destacable que tiene la película.

Quinn, por su parte, logra despegarse de la antorcha humana de Chris Evans. Esta versión es más madura que la anterior, aunque no pierde su gracia ni su humor. Sigue siendo un personaje relajado, pero también clave en la resolución del conflicto. Queda claro que Johnny Storm es una especie de genio también, lo que justifica aún más su presencia en aquel vuelo espacial que le dio sus poderes. La interpretación de Quinn es divertida y emocionante.
Ebon Moss-Bachrach pone más que su voz para The Thing, pone también su carisma y personalidad. Su Ben Grimm no es un viejo gruñón que reniega de lo que le tocó, sino un tipo duro con un corazón blando. Es fuerte y fiel a su familia, sensible a lo que sienten sus seres queridos, pero también un hombre que añora lo que supo ser. Por eso vuelve una y otra vez al barrio de su niñez y mira con tristeza las imágenes de su anterior rostro.
Los 4 Fantásticos: Primero Pasos es un gran acierto de Marvel Studios, una gran sorpresa en medio de tantos errores. Es cierto que no llega al nivel de la fase 1 y 2 del MCU (en la que todo era nuevo y a descubrir), pero si la fase 6 se mantiene en esta línea, no hay dudas de que será un grato camino por recorrer.